LA POLÌTICA EDUCATIVA EN MÈXICO

México es un país que cuenta con la educación desde primaria hasta secundaría sustentada por el Estado. Aunque la demanda de personas que desean estudiar es mayor que la oferta, es  mejor tener algo a no tener nada.

En cuanto a la educación superior el erario público sirve para subsidiar a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la queja de otras universidades públicas como las que pertenecen a las diferentes entidades federativas es el reparto desigual de los fondos públicos, acaparando la UNAM la mayor parte de ese dinero.  Lo anterior conduce a que  se caiga en un centralismo, es decir, que sea sólo un institución educativa sea la que se desarrolle más que las otras. Una alternativa a esta situación ha sido la expansión  de la UNAM más allá del Distrito Federal, ubicando campus en diferentes entidades de la República Mexicana.

Otra aspecto de la política educativa mexicana que debe de resolverse es el de la relación egresados-empleo, es decir, no basta que un país tenga gente con ciertos grados de estudios, si esto no esta aparejado simétricamente con el correspondiente empleo a lo hora de egresar o culminar sus estudios. Se debería hacer una planeación sobre las ofertas de empleo existentes y las carreras que se están abriendo para llenar esos vacíos labores. De otro modo ocurre lo que pasa en la actualidad, personas con posgrados ejerciendo el rol de taxistas para sobrevivir.